Modelo de carta de pésame amistosa
Antes de empezar a escribir un mensaje de condolencia, tómese su tiempo para leer estos consejos. Al fin y al cabo, dar el pésame no es un acto trivial. El duelo es un momento difícil y único para cada persona y familia que lo experimenta. Por ello, es necesario adoptar el tono adecuado y evitar ofender a los destinatarios. Por ello, su tarjeta o carta de pésame debe respetar ciertos códigos, que le proponemos descubrir.
¿Cómo escribir una nota de pésame?
“Le envío mi más sentido pésame en este momento de duelo y le hago llegar mi simpatía y apoyo”. “Les deseo todo el consuelo, el apoyo, el valor y la amabilidad que merecen en estos momentos difíciles”.
¿Cómo presentar sus condolencias de forma profesional?
Estimado colega, lamento la muerte de su XXX (marido, mujer, hijo, padre…). Le doy el pésame y deseo expresarle mi apoyo en esta dolorosa prueba. Le envío mis más sinceros pensamientos y espero volver a verle en circunstancias más felices.
Pésame por el fallecimiento de una persona mayor
Generalmente, para agradecer a estas personas sus mensajes de condolencia, la familia utiliza una tarjeta de agradecimiento que puede incluir una foto del fallecido y una de sus citas, así como un mensaje de agradecimiento de la familia.
Entre las muchas tarjetas de pésame con una cita, se puede optar por ofrecer una que represente un fragmento de Alfred de Musset: Tu trouve, dans la joie ou dans la peine, ma triste main pour soutenir la tienne, mon triste cœur pour écouter le tien. También puedes elegir como cita: Love is the only thing you take with you into eternity.
Condolencias conmovedoras
Demandant au Seigneur d’accueillir le défunt dans la paix et dans l’éternité de Son Royaume, je demande au Seigneur de faire descendre sur ceux qui sont touchés par cette mort l’abondance des bénédictions divines, gage de réconfort et d’espérance.
En nombre del pueblo estadounidense, Laura y yo hacemos llegar nuestro más sentido pésame a Vuestra Alteza Real la Princesa de Hannover, a Su Alteza Serenísima la Princesa Estefanía y a todo el pueblo de Mónaco por el fallecimiento de Su Alteza Serenísima el Príncipe Rainiero III.
Tengo el triste deber de transmitirle mis sinceras condolencias por el fallecimiento de Su Padre, que durante más de 55 años sirvió a Su país con dedicación y dignidad. Estoy seguro de que la prosperidad del Principado de Mónaco en la actualidad será ampliamente considerada como un testimonio de la sabiduría y la habilidad del Príncipe Rainiero.
” Me he enterado con profundo dolor esta mañana del fallecimiento de Su querido Padre, Su Alteza Serenísima el Príncipe Rainiero III, y en esta triste ocasión me gustaría transmitirle a Usted y a todos los miembros de la Familia Grimaldi, mi más sentido pésame por su gran pérdida. Siempre recordaremos con admiración al Príncipe Rainiero.
Texto simple de pésame
Al igual que en sus dos intentos de golpe de Estado de 1836 y 1840, Luis Napoleón siempre contó con el apoyo de los francmasones[53], por ejemplo, Jean-Claude Besuchet de Saunois (1790-1867), que era francmasón[54]. Durante la campaña electoral para las elecciones presidenciales de otoño de 1848, apoyó a Luis Napoleón con carteles[55].
Creado por Honoré Daumier, el personaje de Ratapoil simboliza al butanero partidario de la causa bonapartista, armado con un bastón de plomo y miembro de la sociedad Dix-Décembre[98]. 98] En esta caricatura, él y sus compañeros villanos gritan “¡Viva el Emperador!” mientras blanden sus sombreros al final de sus bastones durante una revista militar. Litografía de Daumier, Le Charivari, 1 de julio de 1851.
El 21 de julio de 1851, tras un mes de debate, la Asamblea votó la reforma constitucional. Aunque obtuvo una mayoría de 446 votos a su favor (incluido el de Alexis de Tocqueville) frente a 278 votos en contra, la revisión constitucional no fue adoptada, por no haber obtenido más de 3/4 de los votos de los diputados, umbral exigido por la Constitución. Los partidarios de la revisión no alcanzaron el centenar de votos, entre ellos los de orleanistas intransigentes como Charles de Rémusat y Adolphe Thiers[107].
