Desfile de Roberto Diz
El diseñador gallego afincado en Sevilla volvió, tras quince años de ausencia por desavenencias con su antigua directora – Cuca Solana -, a la Mercedes Benz Fashion Week Madrid y, como de costumbre, no defraudó.
“Macarra sofisticado”, “discípulo aventajado de Elio Berhanyer”, etc., son solo algunas de las descripciones que más conocemos sobre este creador que, poco a poco, ha ido haciéndose un hueco entre los imprescindibles del panorama nacional.
Su colección consistió en un homenaje a los años 80/90 y a los diseñadores franceses de esa época; un mundo inspirado en imágenes en Thierry Mugler y en fotografías de Helmut Newton.
Los tonos oscuros, principalmente el negro, pero también el azul y el burdeos, se apoderaron de la pasarela, iluminada por escasos puntos de luz que se reflectaban sobre los materiales metalizados que formaban parte de la mayor parte de los modelos. La música hizo el resto.
En cuanto a los tejidos, la colección giró en torno a los neoprenos, el nylon, el terciopelo, las lanas y los metalizados, que se convierten en la armadura de la mujer combativa, sexy y poderosa que defiende – y define – Diz: “Creo que una mujer puede ser muy femenina, o muy feminista, llevando escote y tacones”.
Especial mención merecen los sombreros de vinilo negro, creados para la ocasión por Benjamín Bulnes, los guantes verde fluorescente y las botas negras “over the knee” que llevaban todas las modelos y servían de hilo conductor de la propuesta.
Por último, y no menos importante, Roberto contó con la presencia de dos modelos de excepción: sus amigas Laura Sánchez y Godeliv van den Brandt, que fueron las encargadas de cerrar el desfile.
¡Enhorabuena, MAESTRO!
Foto: www.telva.com
